Vuelve la Lliga Catalana y parece un buen momento para hacer un poco de pedagogía histórica de nuestro deporte.
En el año 325 d.C., el emperador Constantino el Grande prohibió los combates de gladiadores, enormemente populares. El líder romano había abrazado la fe cristiana y la visión negativa de la violencia y la crueldad del nuevo credo imperial no era compatible con aquel desparrame de vísceras por la arena.
Pero la sociedad romana estaba acostumbrada a aquel entretenimiento truculento, y el emperador encontró un sustituto trufado de emociones fuertes para evitar quejas: el año 348 d. C. se jugaba en Barcino la primera edición de la Lliga Catalana d’Escacs.
Para empezar la temporada 2024 habíamos conseguido reclutar la flor y nata de la centuria local: Dani Moreno, Ramon Chalmeta, Jaume Ros, Jordi Bada, Fernando Iglesias, Joana Ros, Manel Navarro, Josep Chalmeta, Miquel Castells y Rafa Rodríguez. Volvía Navarro ha defender la camiseta santboiana, lo que augura una temporada de emociones fuertes y buenas tortas ajedrecísticas, en cara propia y ajena.
Teníamos pequeñas ventajas de elo en todas las mesas menos en la última, pero en el papel estaba todo bastante igualado.
Habían establecido un perímetro de seguridad de un kilómetro a la redonda del local para evitar disturbios, si bien algún despistado pensaba que el motivo era alguna de las numerosas pruebas deportivas que se celebran en la ciudad condal.
Este año tengo el propósito de pasar más tiempo sentado ante el tablero que pululando por el local, y eso, añadido a que acabé el primero, me dejó poco margen para recabar información para crear una crónica rigurosa y que honre la verdad, elementos por otra parte ausentes en relatos anteriores sin que ello haya supuesto conflicto alguno.
Así que a las dos horas y media entrego un caballo, meto la dama en h6 y surge la magia: mi rival no tiene defensa y nos adelantamos en el marcador.
No cabiendo en mí de alegría me empecé a henchir como un globo, de tal modo que tuve que abandonar el local ante el riesgo de quedar atrapado.
La consulta del acta y los comentarios posteriores confirman la buena intuición de Constantino: ganamos por la mínima con una victoria de Miquel Castells que decantó un match tenso y emocionante a nuestro favor, y convirtió a nuestro noveno tablero en el héroe de la jornada.
Buenas tablas de Dani en la primera mesa que empezó anotándose el primer round en su combate particular contra Ramon, que no fue capaz de puntuar. Jaume, en la tercera, ganó y mira de reojo el duelo entre primero y segundo y sonríe: pronto será el duelo entre el segundo y el tercero.
Bada no empezó bien el año y debutó con derrota. Por suerte, Fernando hizo de Fernando y logró una victoria imprescindible para acabar bien el domingo. Joana y Navarro tampoco tuvieron suerte y les tocó firmar bajo el 0.
Pero teniendo a Josep Chalmeta en el equipo no hace falta tampoco tener mucha suerte. Ganó su primera partida de la temporada, y esperemos que la primera de muchas, porque lleva unos años haciendo una Lliga espectacular y es una de las claves para haber conseguido mantener el primer equipo en primera división durante tantos años.
El próximo domingo con el factor cancha a favor toca recibir a otro B, esta vez el Ateneu Colon.
¡Hasta entonces!
Rafa Rodríguez
Club d'Escacs Sant Boi 